POR: Balvina Suero
De verdad creo que entiendo por qué la cadena Secrets se llama así: ellos parecen producir los secretos mejor guardados.
Miren, por ejemplo, el Secrets Cap Cana. Este resort para adultos está ubicado en el complejo cerrado de Cap Cana, y la seguridad a la hora de acceder es exhaustiva.
Al llegar al lobby, quedé encantada con la distribución: desde la recepción se ve la playa. Ese fondo natural, junto con el piso de madera y una bienvenida con un jugo natural de mango fresco —con todo y pulpa—, son detalles que hacen pensar que uno está en un hotel boutique. Sí, así lo describiría: como un hotel boutique que en realidad es un todo incluido.
De hecho, esa sensación se extiende hasta al buffet de comida: los platos de pinzón no son enormes, sino que son mucho más pequeños que el tamaño normal, y eso significa que el staff los rellena con mayor frecuencia. Eso da una sensación más personalizada en el servicio de alimentación.
Hablando de una sensación personalizada, el Secrets Cap Cana tiene un servicio de mayordomía incluido. Los mayordomos se encargan, por ejemplo, de realizar reservaciones en los restaurantes para la cena. Aparte, si están en la playa, no necesita uno preocuparse de buscar algún trago, pues el mayordomo se encarga por uno. ¡Es una cosa impresionante!
Ahora, así como brindan una atención constante, también ofrecen mucha privacidad. El servicio de habitación, por ejemplo, se ordena a través de una tableta —a cada huésped le entregan una a su llegada—. La comida llega a través de una puertecita en cada habitación, que anuncia su llegada con el encendido de una luz. Es muy conveniente, porque así puede uno recoger la bandeja en el momento de mayor conveniencia. Al terminar de comer, es solo cuestión de volver a colocar el servicio en la compuerta, que ellos lo retiran.
¿Otro toque de privacidad? Una parte de las habitaciones es swim up, con un tramo de piscina directamente para cada suite.
Pero, aquí entre nosotros… ¿Quién pasa mucho tiempo en la piscina cuando ahí mismo está Juanillo, una de las playas más bellas de República Dominicana? Yo solo lo voy a resumir de esta manera: yo salí a la playa a tomar una foto… y más de 150 tomas después, ¡casi se me acaba el espacio de almacenaje en la tarjeta de la cámara!
Por eso, con total y absoluta confianza: si están buscando un resort local para pasar un fin de semana sumergidos en el lujo que vive entre esa fina línea entre la atención dedicada y la privacidad, ¡este es su lugar!
Fotos: Balvina Suero
