Nueva York es mágica en cualquier momento, pero en verano está llena de posibilidades: de dar con una azotea al azar, de descubrir un país tropical dentro de Brooklyn o de conocer las aguas del Hudson de ahí a ahí. Por eso, recién llegados de una visita a la ciudad, nuestros clientes Luis Eduardo Sánchez y Ernesto Geara –los directores de Canvas Design Media— nos trajeron una lista de cinco aventuras cortas para disfrutar la Gran Manzana cuando el sol está en sus buenas.
POR: Luis Eduardo Sánchez y Ernesto Geara
1. UN PASEO POR EL HUDSON EN UN BARCO RESTAURANTE
No todos los días del año puede uno montarse en un bote que es a la vez un restaurante, y disfrutar de la espectacular vista de Nueva York con comida para compartir y cócteles bien cargados que hacen a uno sonreír aún más. Por eso, durante todo el verano es imprescindible tener un paseo en el North River Lobster Company en la lista. Esta embarcación de tres niveles tiene entrada gratuita y sale a horas puntuales cada día, con vueltas que duran aproximadamente 25 minutos, pero el comensal decide cuánto tiempo quiere quedarse en el barco –mientras está parado en el muelle puede uno seguir tomando y comiendo–.
2. DISFRUTAR DE LAS AZOTEAS DE LA CIUDAD
El verano se hizo para tocar el sol, y para eso vale la pena disfrutar del atardecer en una azotea neoyorquina. Entre las más recomendadas están las de Le Bain, La Birreria y PH-D –todas con vistas dignas de varias fotos para Instagram–.
3. UNA GIRA POR EL HIGH LINE
El High Line es un parque urbano elevado construido sobre una antigua línea de ferrocarril, y cuenta con más de dos kilómetros de longitud repletos de cosas interesantes para hacer: desde disfrutar sentados de la vista hasta tomar clases de pilates, visitas guiadas e incluso clases de astronomía. Nosotros recomendamos hacer una gira con ropa ligera, mucha hidratación y buena onda.
4. PARAMOUR EN BROADWAY
No puede uno perderse el recién estrenado musical de Cirque du Soleil en Broadway, Paramour. No queremos adelantar mucho, para que el show pueda sorprender al 100 por ciento, pero solo hay que imaginar un espectáculo lleno de músicos, actores, contorsionistas, malabaristas, gemelos acróbatas y decenas de personajes más que, unidos a una historia inspirada en el Viejo Hollywood, mantienen al público emocionado durante sus dos horas y 15 minutos de duración. Ojo: ¡No se permiten tomar fotos dentro!
5. MISS FAVELA EN BROOKLYN
El verano tiene un sabor tropical al cual la mismísima Nueva York no puede resistirse, y esto Miss Favela en Brooklyn lo sabe. Este restaurante es como una especie de colmado típico brasileño, con samba en vivo y platos locales de la tierra de la feijoada. Lo mejor son las caipirinhas y la vibra de las personas, que hasta se paran en la mesa a bailar con amigos. Luego de la dosis de sabor sudamericano, una vuelta por Williamsburg sería ideal para cerrar el día.
Fotos: Cortesía de Luis Eduardo Sánchez y Ernesto Geara